
Una startup es una empresa que surge a partir de una gran idea innovadora o bien, como dice Michael Wolfe, fundador de varias empresas, “Es posible crear una buena idea, pero las grandes startups son a menudo el resultado de ideas que parecen ridículas antes de ver que funcionen”. Estas empresas empiezan como pequeñas, con el objetivo de convertirse en empresas rentables en el menor tiempo posible y con el deseo de consolidarse y crecer exponencialmente.
¿Qué factores influyen en el éxito de una startup?
Esto es difícil de predecir, ya que existen varios factores que lo determinan, y en algunos casos, estos no dependen de los emprendedores. Frecuentemente escuchamos de empresas que llevan poco tiempo en el mercado y desafortunadamente salen; pero también existen empresas que resultan tener un prestigio y crecimiento asombroso.
Existen tres aspectos importantes que no garantizan la durabilidad y éxito de una startup, pero sí favorecen a la planeación, desarrollo y progreso de esta y de su equipo.
Innovación en el servicio o producto
La innovación es uno de los elementos que siempre se tiene que tener presente cuando se está pensando en iniciar una startup, pues el 10% de las empresas exitosas son aquellas que ofrecen un producto o servicio que no se encuentra ya en el mercado, o aquellas que satisfacen una necesidad. Varios estudios demuestran que solo el 10% de las startups logran tener éxito. Esto puede deberse a que no satisfacen alguna necesidad, no tienen fondos suficientes, el equipo de trabajo no es el adecuado, por temas de costos, no había un modelo de negocio, etc. Es importante revisar todos estos aspectos antes de empezar.
Buena organización
Se puede decir que la organización es uno de los elementos más importantes para que una empresa tenga un buen funcionamiento interno y externo. Esta no solo debe estar presente entre los socios y el personal que la integra, sino que también se debe implementar en el modelo de negocio, marketing, promoción, etc., para asegurar un crecimiento estable y determinar si habrá un buen futuro para la startup.
Aprender a escuchar y no tengas miedo al fracaso
Estas dos cualidades son unas de las más importantes, pero también de las más difíciles. Como emprendedores es importante aprender a escuchar, pues todo lo que la gente pueda aconsejar o retroalimentar ayudará a que la empresa mejore y se consolide con el paso del tiempo, tomando en cuenta que en todas las startups el tiempo es uno de los elementos más valiosos. Sin embargo, algunas veces el miedo al fracaso vence a las personas y automáticamente se crea una barrera que nubla la toma de decisiones y pronóstico de crecimiento, a corto, mediano y largo plazo. Como emprendedores debemos dejar a un lado este temor, porque si no se arriesga no se puede obtener el éxito.
En las startups, como en todo negocio, la suerte juega un papel importante; ¿pero quién dijo que esta juega por sí sola?, seamos mejores emprendedores tomando en cuenta estos aspectos para sobrepasar los obstáculos, motivar a nuestros equipos constantemente y así lograr que las pequeñas empresas se conviertan en un sueño hecho realidad.